Ahora que los hijos todavía son una premonición de tiempos por venir, que la vejez no achaca los huesos, y que las fuerzas de vivir siguen intactas, debería usted ir pensando en que es ahora si que si, que lo soñable es posible y bien probable, y que solo falta un primer paso para echarse a andar. Un abrazo muy grande!
Ahora que los hijos todavía son una premonición de tiempos por venir, que la vejez no achaca los huesos, y que las fuerzas de vivir siguen intactas, debería usted ir pensando en que es ahora si que si, que lo soñable es posible y bien probable, y que solo falta un primer paso para echarse a andar.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande!